Shifra Buchris, de 44 años, es madre de diez hijos y comandante de la unidad de patrulla de la Policía Militar del Sur.
El sábado 7 de octubre, rápidamente se dio cuenta de los que estaba sucediendo y, sin esperar la orden de reserva de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), ella acompañada por su adjunto, el inspector jefe Ram Amrani, el sargento de primera clase Baruch Avischal y el sargento mayor Yoniv Cohen Dahar, se dirigieron valientemente en dos vehículos privados no blindados hacia el complejo donde se estaba llevando a cabo la fiesta rave.
Durante 12 horas, Shifra y el equipo rescataron a personas de la masacre, en medio del caos y bajo fuego constante. Se encontraron con jóvenes que fingieron estar muertos y sobrevivieron, y lamentablemente cientos de cadáveres. No permitieron que el horror los detuviera.
"No sé si tiene algo que ver con el hecho de que soy madre de diez hijos, pero tenía una certeza: intentar resguardar el mayor número de niños. Sus madres los estaban esperando en sus casas."
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